En una audiencia en el Reclusorio Norte, el juez Gerardo Alarcón López decidió aplazar la audiencia intermedia debido a que Pemex y la UIF (Unidad de Inteligencia Financiera) incrementaron el monto del acuerdo reparatorio para Emilio Lozoya, exdirector de Pemex, en un 200% (30 millones de dólares). La defensa de Lozoya argumentó que el aumento no tenía justificación y que ya se había aprobado un monto menor en reuniones anteriores con el Consejo de Administración de Pemex.
El juez llamó a todas las partes a llegar a un acuerdo y pidió a la Fiscalía General de la República (FGR) que cumpla con sus obligaciones como entidad investigadora en el caso de la planta de fertilizantes Agronitrogenados y los sobornos de Odebrecht.
Durante la audiencia, Lozoya acusó al gobierno de querer extorsionarlo y calificó el nuevo monto como inmoral e ilegal. Su abogado anunció que interpondrían amparos para declarar la prescripción de los delitos y por el reconocimiento de la legalidad de la UIF y Pemex para negociar.
Lozoya también afirmó que su estado de salud se ha deteriorado debido a la prisión preventiva y manifestó su disposición a colaborar como testigo con la FGR para obtener su libertad. En el caso, Lozoya enfrenta acusaciones relacionadas con la compra a sobreprecio de la planta de fertilizantes y sobornos recibidos de Odebrecht a cambio de contratos en México.
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Fuente: El Economista por Maritza Pérez